Tossa de Mar en Girona, es un paraíso de cara al mediterráneo que enamoró en su momento al pintor Marc Chagall y a la actriz Ava Gardner.
Antiguo pueblo de pescadores, en verano el clima promedia los 30º C y los visitantes suelen disfrutar de las playas y de sus impresionantes calas. Tossa de Mar es un refugio de sol, playa, relax, su playa más conocida es la playa Gran, justo en el centro de la ciudad con una extensión de 385 metros de longitud.
Las playas y calas de Tossa de Mar no tienen nada que envidiar otras de la geografía española. Son una maravilla, aguas cristalinas, limpias y de arena fina y dorada. Algunas de ellas más urbanas y con todos los servicios al alcance del turista, otras casi de imposible de acceso.
Las aguas cristalinas y el excepcional fondo marino convierten a Tossa de Mar en un paraíso para los amantes del submarinismo y el snorkel donde con unas buenas gafas de buceo es posible ver con todo lujo de detalle meros, congrios o peces de San Francisco entre una variada fauna acuática.
Qué visitar en Tossa del Mar
Cala Pola
Es una de las calas más bellas y recónditas con aguas cristalinas y un entorno difícil de encontrar en otros lugares de veraneo. Localizada a 4 km al norte y al lado de un camping. Acceso en coche hasta la barrera y seguir a pie.
Vila Vella
Es un ícono para la localidad de Tossa de Mar, si cierras los ojos y piensas en Tossa de Mar lo primero que te vendrá a la mente será la típica postal del imponente castillo alzándose sobre el mar para proteger a la ciudad de los piratas.
La Vila Vella es una maravilla que alberga y protege caminos estrechos de cantos rodados en un entorno puramente medieval. Sus muros de pierda dan cobijo a la zona conocida como el barrio viejo. Si estás atento podrás ver un pequeño acceso a la caleta, lugar desde donde los pescadores dejaban sus barcas después de largas horas de pesca, este acceso se le conoce por el agujero del demonio, un pequeño acceso en la muralla creado por estos pescadores.
Muralla medieval
Una de las grandes atracciones de Tossa de Mar es su imponente muralla medieval, construida entre el siglo XII y el siglo XIII. Es útil recorrer todo su perímetro cuando baja un poco el sol, porque las vistas del atardecer y de la costa son espectaculares. Se compone de cuatro torreones y tres torres de vigilancia con forma cilíndrica, siendo la principal la Torre d’en Jonàs, que preside la bahía desde lo alto.
En el punto más elevado de la muralla encontramos el Far de Tossa, el faro de Tossa de Mar, justo en el lugar donde se situaba un castillo que servía, también, de torre de vigía.
Gastronomía
Uno de los platos típicos de Tossa es su famoso Simitomba, un plato con una buena base de pescado fresco (puede ser rape) al que se le añade un rico fumé de pescado, patatas, perejil, ajo, sal, tomate, azafrán, aceite de oliva y ali-olí. Un típico plato de pescadores.