Situada a los pies del Cerro de Santa Catalina, la ciudad de Jaén se muestra firme al paso de los tiempos, gran capital durante los tiempos de los musulmanes, y la reconquista cristiana, actualmente vive un poco anclada en el pasado, aunque lucha por reformarse y reinventarse para los nuevos tiempos.
Entre los elementos que más destacan de la ciudad, es su castillo con tres alcázares, los baños árabes, y sobretodo su Catedral. Muy cerca se ubica el museo de las Navas de Tolosa, lugar donde se dio la batalla clave para la reconquista española, donde el ejercito cristiano infringió una derrota al ejército musulmán, que no solo hizo que perdiera la batalla, sino que además hizo que los reinos musulmanes se dividieran y nunca más se pudiera dar una batalla de tales características por la falta de entendimiento entre ellos.
La Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, destaca su fachada barroca y la Reliquia del Santo Rostro es muy apreciada en la ciudad. La basílica de San Ildefonso, de estilo gótico, tiene el santuario a la Virgen, co-patrona de la ciudad, data del siglo XIII aunque se han ido añadiendo y modificando elementos según se ha ido restaurando al cabo de los años.
La Judería es otra zona para visitar, llamado Barrio Santa Cruz, aquí es donde residió la comunidad judía. Los baños árabes es otro legado de la cultura musulmana, muy cerca del Palacio del Conde de Villapando, estos baños árabes en perfecto estado de conversación, son los más grandes de toda Europa.
El Castillo de Jaén es otro referente para los turistas, un conjunto militar que defendía la ciudad, las primeras construcciones en defensivas en la zona que está el castillo datan de los tiempos de Aníbal, al cabo de los siglos se le han ido incorporando y modificando elementos para mejorar su defensa, por ello es uno de las obras más antiguas de la ciudad.
Otros lugares que se deben visitar en nuestra visita por la ciudad, es el Palacio de los Vilches, donde sus arcos nos recuerdan a los tiempos musulmanes, la Iglesia de San Juan con su torre, o el Real Convento de Santo Domingo, sin olvidarse del Palacio del museo de Jaén.
Las murallas de origen romano, ha moldeado la construcción del centro histórico adaptándose a ellas, hasta que se fue derribando hasta solo conservarse la llamada Puerta del Ángel.
Pero si queremos pasear un rato, la Alameda de los capuchinos es el sitio con más solera de la ciudad, construido en el siglo XVI, ha sido reformado y rehabilitado en diferentes ocasiones dándole nuevos monumentos y mejorando sus jardines, un lugar para desconectar. Otro es el Parque Andrés de Vandelvira, mucho más grande que el anterior, se pueden realizar diferentes actividades de ocio al aire libre como rutas en bicicleta.