La Iglesia de San Marcos se constituye en un edificio barroco del siglo XII, situada cerca del centro de Florencia, tiene un interior con nave única. En el centro del techo tallado, Nuestra Señora en la Gloria, de Pucci (s.XVIII). Por encima de la puerta de entrada en el interior, tabla con gran Crucifijo de escuela de Giotto. Recordamos entre las demás obras, La Virgen y Santos, de Fray Bartolomé (1509) en el segundo altar de la pared derecha, en el tercero, mosaico del siglo VIII que representa a la Virgen en la oración, procedente del Oratorio del Papa Juan VII, de Roma. El altar sucesivo se inserta en el arco de Giambologna (1580) coronado en lo alto por un S. Zenobio del mismo artista.
Capilla del Altar Mayor, de Silvani. Está revestida de frescos de Gherardino (1717) con la Gloria de la Orden de Dominicos en la cúpula; la ültima Cena, bajo el órgano, es de la escuela florentina del s. XVIII. En las paredes laterales, Bodas de Canaan y Adoración de los Magos, del francés Parrocel (1702). A la izquierda de la Capilla del Altar Mayor, entrada a la Capilla Serragli (suele estar cerrada) decorada con pinturas de finales del siglo XVI.
En el brazo izquierdo de la Iglesia, Altar de S. Antonino, donde se venera el cuerpo embalsamado del Santo.
Dirigiéndonos hacia la salida, las lápidas sepulcrales que podemos ver a nuestra derecha, en la pared, nos recuerdan los nombres de Pico de la Mirándola (1463-94) y del poeta humanista Poliziano. Saliendo de la Iglesia a la izquierda, entrada al Museo de San Marcos, con las obras de Fray Angélico.